El proceso de reconstrucción de senos generalmente se realiza en varias etapas. En muchos casos, se puede comenzar la reconstrucción inmediatamente después de la mastectomía, aunque también es posible realizarla en una fecha posterior. La reconstrucción con implantes mamarios implica la inserción de un implante de silicona o suero fisiológico debajo de los músculos del pecho o directamente debajo de la piel. La transferencia de tejido autólogo implica tomar tejido de una parte del cuerpo, como el abdomen o los glúteos, y transferirlo al área del seno para reconstruirlo. La reconstrucción con colgajo utiliza tejido de la espalda, el abdomen o los glúteos que se mantiene conectado a su suministro de sangre original para crear un nuevo seno. El proceso completo puede llevar varias semanas o meses, y es importante seguir las indicaciones del cirujano para obtener los mejores resultados.

La recuperación de la reconstrucción de senos varía según el tipo de procedimiento y la salud individual de cada paciente. Es normal experimentar algo de dolor, hinchazón y malestar después de la cirugía. Se pueden recetar medicamentos para controlar el dolor y se recomienda usar prendas de compresión para ayudar a reducir la hinchazón. Durante la recuperación, es esencial seguir las instrucciones del cirujano, como evitar levantar objetos pesados, limitar la actividad física y mantener las heridas limpias y secas. El apoyo emocional también es crucial durante este tiempo, y muchas mujeres encuentran beneficio en grupos de apoyo o terapia para sobrellevar la experiencia de reconstrucción.

Como en cualquier procedimiento quirúrgico, la reconstrucción de senos conlleva ciertos riesgos. Estos pueden incluir infección, sangrado, problemas de cicatrización, cambios en la sensibilidad del seno y el pezón, asimetría en los senos y problemas con los implantes, como rupturas o contracturas capsulares. Es importante discutir detalladamente los riesgos y las expectativas con el cirujano antes de someterse a la reconstrucción de senos.

La reconstrucción de senos puede tener beneficios significativos tanto físicos como emocionales. A nivel físico, puede restaurar la apariencia y forma del seno, ayudando a mejorar la simetría y la uniformidad con el seno restante. Esto puede brindar a las mujeres una sensación de normalidad y confianza en su cuerpo. A nivel emocional, la reconstrucción de senos puede tener un impacto positivo en la autoestima y la calidad de vida de las mujeres, al ayudarlas a superar las dificultades emocionales y la pérdida asociadas con el cáncer de mama.